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Utilizar tecnología de rayos X para descubrir el dopaje mecánico

Ahora es más fácil que nunca descubrir el dopaje mecánico en el ciclismo.

El dopaje es uno de los problemas actuales del ciclismo y está perjudicando la imagen de este deporte. Por este motivo, la Unión Ciclista Internacional (UCI) se ha situado en primera línea en el desarrollo de medidas correctoras. El dopaje se refiere tanto a la manipulación médica utilizando eritropoyetina (EPO) o sustancias similares como a las infracciones técnicas deliberadas. Al principio, estas últimas solían consistir en el uso de una bicicleta de carreras por debajo del peso mínimo. La bicicleta más ligera era sustituida en secreto durante la carrera, de modo que el ciclista llegase a la línea de meta con una legal. Pero ahora, la rápida evolución de la tecnología de las bicicletas eléctricas ha dado lugar a otra forma más efectiva de dopaje: el dopaje mecánico. Con ayuda de un motor en miniatura, los ciclistas deshonestos se pueden ahorrar mucho esfuerzo. La UCI utiliza una máquina portátil de rayos X para detectar este tipo de engaños. La tecnología se ha desarrollado en el marco de una colaboración transatlántica entre HEITEC PTS (Alemania) y VJ Technologies (Estados Unidos). La empresa alemana (anteriormente Erhard+Abt) —radicada en Kuchen, en el estado de Baden-Württemberg— se fundó hace más de 20 años y está especializada en tecnología industrial de rayos X.

Potencia eléctrica para aumentar la tracción ilegalmente

Los ciclistas profesionales que buscan un atajo no utilizan un motor convencional para bicis eléctricas, que puede tener una potencia de unos 250 vatios. Solo necesitan unos 20 o 40 vatios extra para obtener una ventaja mínima pero decisiva. Las piernas de un ciclista profesional entrenado pueden generar 400 vatios de fuerza de tracción por sí solas, por lo que no es de extrañar que un incremento tan pequeño pueda marcar la diferencia. “Solo hace falta un pequeño motor que funcione con minipilas. Estos motores van generalmente escondidos en el tubo del asiento, es decir, en la parte del bastidor que va desde el sillín hasta el soporte inferior”, afirma Christian Abt, socio director de HEITEC PTS. Activado con un pequeño botón, este motor permite al ciclista ahorrar energía durante una escalada, por ejemplo, de modo que pueda puntuar en el tramo final.

Anteriormente no existía un método sencillo de demostrar este tipo de engaño.

Para empeorar las cosas, anteriormente no existía un método sencillo de demostrar este tipo de engaño. Con la cantidad de materiales ligeros que existen para construir bicis de carreras, es fácil compensar el peso adicional del motor utilizando componentes más ligeros en otras partes. De este modo, es imposible apreciar la diferencia entre la bicicleta modificada y un modelo legal sobre la balanza de inspección. Los detectores metálicos tampoco son capaces de identificar cualquier traza de dopaje mecánico, ya que el motor eléctrico se coloca junto a los piñones y los pedales, donde ya hay mucho metal. Lo mismo cabe decir de las cámaras térmicas, ya que los motores se enfrían por completo en tan solo diez minutos.

Las inspecciones contra el dopaje mecánico son cada vez más rigurosas

En la primavera de 2018, la UCI desveló esta nueva herramienta en la lucha contra el dopaje mecánico: una máquina portátil de rayos X. Con un peso total de dos toneladas, pronto se utilizará el equipo de inspección de rayos X sobre ruedas en el Giro de Italia, el Tour de Francia y otras carreras ciclistas internacionales, donde analizará las bicicletas de los ciclistas en la línea de salida y en la línea de meta. El mecánico responsable introduce la bicicleta en la cabina de rayos X. Es aquí donde entra en juego la tecnología de perfiles de nuestro sistema de construcción modular MB, para conformar el soporte que coloca y fija la bici.

Conocemos a item desde hace 20 años.

“Para empezar, conocemos a item desde hace 20 años. Por una parte, elegimos item porque nos da mucha flexibilidad. Por otra, utilizamos un eje conducido lineal que nos permite conseguir posiciones preestablecidas automáticamente. Esta solución de item, que nos permite obtener todo del mismo proveedor, es enormemente ventajosa”, afirma Abt. Una vez colocada la bici en la cabina, el inspector de la UCI examina todos los puntos importantes, como la parte del bastidor junto a las ruedas y en torno al soporte inferior. Tras la inspección, se aplica un sello a la bicicleta para identificarla claramente.

Un método flexible para combatir el dopaje mecánico

Aunque ahora existe un método eficaz para combatir el dopaje mecánico, no elimina por completo la posibilidad de que haya ciclistas deshonestos. Aunque las bicicletas —y sus repuestos— se someten a un examen riguroso de acuerdo con distintas estrategias, no es posible controlar constantemente lo que hacen los ciclistas de la parte posterior del pelotón en sus vehículos de servicio y si se manipula una bici de repuesto después de la inspección para utilizarla en la carrera. En cualquier caso, la cámara portátil de rayos X de HEITEC PTS es la mejor herramienta de la que se dispone actualmente para detectar el dopaje mecánico. Tampoco hay que subestimar su efecto disuasorio. ¿Y qué nos deparará el futuro? “Los perfiles de aluminio de item nos ofrecen mucha flexibilidad. Si tenemos que hacer modificaciones o manejar un tipo de bicicleta distinto, la geometría puede cambiar, pero eso no nos supone un problema”, señala Abt.